El proceso de depuración de un inquilino

Todo propietario de una vivienda o local debe agotar el proceso de depuración del inquilino a quien desea alquilar.

Principalmente porque el fin del alquiler es percibir un retorno sobre la inversión que ha hecho en esa propiedad. Y la mejor forma de tomar la decisión para alquilarle a una persona es viendo que sus ingresos le permiten poder cumplir con los pagos.

En que consiste el proceso de depuración de un inquilino:

1. Completar un formulario de solicitud de alquiler.
2. Debe tener un garante o fiador.
3.  Copia de documentos de identidad de ambos.
4.  Demostrar su condición económica (de ambos), con:

• • Carta de trabajo o ingresos.
  • Movimientos bancarios.
  • Referencia comerciales y personales.

Con ello se procede a la verificación en el buró de crédito y bancos, donde podremos ver lo siguiente:

• Capacidad de pago por su nivel adquisitivo.
• Historial  y/o comportamiento de pago.

Que nos aporta estas informaciones

El inquilino debe completar de forma detallada la solicitud de alquiler.  En ella deben aportar las referencias personales y/o comerciales para conocer sobre el interesado como ha sido su comportamiento. De igual forma podemos tener contacto con anteriores propietarios donde ellos han vivido.

Debe proveer un fiador o garante, el cual debe gozar de buen estado crediticio. Puesto que es la persona que le brinda la garantía del alquiler en caso de que el inquilino incumpla.

Con la carta de trabajo o ingreso podemos ver si la persona interesada percibe los ingresos económicos para cumplir con los pagos. En ese mismo orden, los estados de cuenta cumplen el rol de evidenciar si posee otros ingresos o cual es su maneja económico.

Después de analizar todas las informaciones y haber contactado a sus referencias les pasamos a los propietarios la depuración. El propietario deberá tomar la decisión de alquilar sobre la base de las informaciones que tiene.

Finalmente, estoy abierto a escuchar sus comentarios.